La presencia de las empresas en las redes sociales ha aumentado de forma considerable en los últimos años. Tanto pequeñas como medianas y grandes empresas se han dado cuenta de la importancia de estar presente allí donde su audiencia se encuentra y en estos canales que son grandes plataformas para llegar hasta su público objetivo de la marca. Cómo expertos en marketing digital, para responder a las empresas; “en cuántas redes sociales estar” no hay una respuesta estándar. De nada sirve tener muchos canales sociales abiertos y no atender ninguno. Las redes sociales deben estar para crear comunidad y que las marcas estén presentes en el mundo digital.

¿En qué redes sociales debe estar presente la empresa? Esta cuestión se plantea en muchas ocasiones en todo blog de social media y, debido a su importancia en la estrategia online de una empresa, hoy nos hemos planteado abordar esta pregunta clave.

Evitando el “cuantas más, mejor”

El primer consejo es evitar estar presente en muchas redes sociales y hacer una gestión irregular de ellas.  No se recomienda aplicarlo a la presencia en redes sociales. Las razones y los factores que determinarán cuántas y qué redes sociales se adecuan a tu negocio son claras:

  • Debes tener presencia en la red social que esté tu público objetivo.
  • Plantearse la afinidad del negocio con las opciones que ofrece cada red social.
  • Recursos empresariales. Los que dispones permiten la adecuada gestión y actualización para una o varias plataformas sociales.

 

Consigue mejores RESULTADOS con tu estrategia online ¿TE AYUDAMOS?

 

¿Qué redes sociales elegir? Cuestión de objetivos

Como hemos apuntado anteriormente, los objetivos de tu negocio y naturaleza del mismo determinarán qué redes sociales son las más adecuadas. La mayoría de las pymes centran su presencia en las redes sociales para dar a conocer sus productos y alcanzar objetivos de ventas. Para tener una presencia en redes sociales saludable y con futuro, este tipo de empresas debe hacer un seguimiento y medición de acciones. Sin medición ni seguimiento de los resultados no se puede saber la rentabilidad del tiempo y trabajo dedicado a las redes sociales ni tampoco en qué áreas se puede mejorar y cuáles se deben potenciar. Estar alerta de la interacción de la comunidad y el ratio de engagement de la cuenta parte fundamental de cualquier acción de marketing, también en redes sociales. Estos índices se han vuelto indispensables para hoy día según los algoritmos de las redes sociales. Las marcas deben mantener el interés de los seguidores gracias a su participación para mejorar su relevancia como marca en referencia a la competencia u otros perfiles parecidos.

La clave para definir en cuantas redes sociales estar presente está en averiguar en qué redes sociales se encuentra nuestra audiencia y en cuáles podemos sacar el máximo potencial a la imagen de la marca. Para ello podemos recurrir a la asesoría que nos pueden brindar expertos en social media desde una agencia de marketing online.

Mientras tanto, veamos algunos ejemplos según tipología de negocio:

 

  • Una tienda online de ropa encontrará un gran potencial en Pinterest para actuar como fuente de inspiración de sus seguidores pero no es en sí una red social como así la definen sus creadores, aunque Instagram ha llegado pisando fuerte. Es la red social más visual que hace posible crear una comunicación muy rica gracias a la multitud de formatos que ofrece, incluso tiene posibilidades de venta con Instagram Shopping. Los videos promocionales, el carrusel de imágenes para mostrar varios look de temporada o la publicación de un catálogo de productos sirve de inspiración así como ofrece soluciones a consumidoras. Igualmente, en Facebook encontrará un público global femenino y masculino al que llegar mediante acciones variadas. A su vez, Youtube resultará útil para añadir tutoriales o catwalks con las tendencias de la temporada, soluciones para ocasiones especiales y otros consejos de profesionales. Existen otras opciones destacadas en el sector del retail como las apps de moda como 21 buttons, ASOS, Zalando, Privalia, … Son aplicaciones móviles que permiten crear un perfil y ponen en contacto con otras personas con unos mismos intereses; el estilismo y la moda, empresas y consumidores están en estas apps de moda.
  • Una tienda online de bricolaje encontrará gran potencial en Youtube donde mostrar tutoriales completos de bricolaje. En Facebook podrá compartir los enlaces sobre los trabajos publicados en el blog de empresa de bricolaje y también permitirá compartir los vídeos subidos en Youtube. Instagram es la red social en auge en la que mostrar procesos de transformación de estancias o reciclaje de elementos decorativos. Los stories, ya sea en Facebook como en Instagram ofrecen espontaneidad a una marca, algo que a los seguidores les encanta y permite mejorar la interacción con la marca.
  • Una agencia de viajes puede utilizar Facebook e Instagram como sus redes sociales principales en las que estar presente. Facebook le permitirá dar a conocer información o promociones sobre viajes y destinarlo a un target adulto. El contenido audiovisual en redes sociales es una herramienta muy potente para comunicar los productos de la agencia. Por otra parte, en Instagram puede encontrar una plataforma con la que poder llegar a un público millennial y centrarse más en las imágenes y en el valor de los productos de viaje que ofrecen.

Las empresas deben contar con una estrategia digital adaptada a cada red social y a las características de las mismas. Esto permitirá conseguir una mayor eficacia y resultados en cada una de ellas a la vez que se mantiene la coherencia de la marca.

La experiencia nos dice que no existe un número concreto de redes sociales en las que una empresa debería estar presente, sino que dependerá de los objetivos empresariales, del público objetivo al que se dirija y de los recursos con los que cuente.

 

estrategia redes sociales

 

Actualización y monitorización, claves para la gestión de las redes sociales

Si bien estos ejemplos incluyen varias redes sociales, muchas de las pymes no contarán con los recursos necesarios para poder mantener al día todos estos perfiles, ya que requieren un gran nivel de contenido y de monitorización asegurando un nivel de respuesta adecuado a la conversación que se genere en sus perfiles.

Así pues, la respuesta estará en la ecuación que dé como resultado el estudio de la audiencia, las redes sociales más adecuadas al tipo de contenido que se pueda generar y el tiempo y recursos disponibles para ello.

Sea cual sea la opción elegida, lo más importante es asegurarse que el perfil va a ser actualizado convenientemente y a un ritmo adecuado, además de estar permanentemente monitorizado para atender a la interacción de la audiencia con el contenido generado.

Por todo ello, lo más recomendable puede ser empezar con uno o dos perfiles sociales creando una estrategia de contenido para social media, qué protocolo de actuación y extender esta presencia a otras redes de forma progresiva, asegurando siempre un control y manejo adecuado de cada una de ellas, asegurando siempre un control y manejo adecuado de cada una de ellas, quizás una opción es contar con un profesional que gestiones las redes y planifique los contenidos de marca.

 

Redes sociales, el inicio de la estrategia digital

Las redes sociales son solo el punto de inicio para una óptima estrategia digital. La planificación de contenidos sociales generará grandes beneficios a cualquier tipo de empresa, ya sea multinacional o una pyme a nivel local. Pero para ello, el primer paso es adentrarse de lleno en la digitalización.

Contar con una buena web usable para el usuario y accesible desde cualquier dispositivo, debería ser el primer paso para trabajar una buena estrategia digital. Por otra parte, plataformas de gestión como un CRM pueden suponer un avance y, a la vez, un ahorro de tiempo gracias a la automatización y la recopilación de datos y prepararse para el Big Data. Las plataformas de este tipo recopilan, almacenan y clasifican información de gran interés que va desde los datos de contacto de algún cliente hasta información clave que puede ayudar a crear estrategias más individualizadas y efectivas, centradas en el usuario,  con el objetivo de aumentar las ventas.

Y por último, no podemos olvidar la monitorización de los resultados: nos permitirá saber los resultados de las acciones tomadas con el fin de corregir desviaciones, ofreciéndonos la posibilidad de potenciar y repetir las acciones que mejor han funcionado para seguir alcanzando nuestros objetivos.