Seamos honestos. No tenemos que entender cada término legal en nuestras vidas profesionales, pero no está de más aprender sobre términos como la custodia legal y la custodia física, que podemos encontrar en la vida cotidiana. Si eres un padre o compartes tiempo de crianza con un niño, en algún momento tendrás que leer sobre la diferencia entre la custodia legal y la custodia física. La custodia legal de un niño es un derecho legal para tomar decisiones importantes sobre el bienestar del niño. Un padre que tiene la custodia legal es generalmente el padre que es responsable de decisiones importantes sobre la salud, educación y bienestar de un niño, como decisiones médicas o elegir una escuela. La custodia legal de un niño se distingue de la custodia física. La custodia física de un niño es el derecho a que el niño resida con un padre o persona designada. En este contexto, la custodia física puede ser otorgada de manera temporal o permanente. En algunos casos, ambos padres comparten la custodia legal incluso si están separados. Un padre puede tener la custodia física exclusiva. A veces, la custodia se comparte. Otra opción es que a un padre no se le otorgue la custodia legal o física en absoluto. No hay un enfoque único para todos, y el tribunal toma una decisión basada en una serie de factores. Las implicaciones de la custodia legal y la custodia física son serias, pero ninguna es más seria que aquellas en las que los padres se separan. Ahí es cuando el tema de la custodia se vuelve importante. Al educar a los padres sobre la diferencia entre la custodia legal y la custodia física, estarán mejor capacitados para desarrollar un ‘plan de crianza’ que funcione para ellos.

Para más información sobre arreglos de custodia, puedes visitar Wikipedia.