Los hábitos de los consumidores en los últimos años han cambiado mucho. Antes de que Internet se popularizara y las marcas hicieran estrategia digital, cuando nos surgía una necesidad en concreto lo que hacíamos era buscar la recomendación de amigos o conocidos. Por ejemplo, cuando querías cambiar de coche y te gustaba uno en especial seguramente preguntabas a algún amigo que tuviera un coche de la misma marca y él te adelantaba todos los detalles que querías saber. También podías comprar revistas especializadas en las que te podías informar. Posteriormente ibas al concesionario y era el vendedor el que hacia una gran parte del trabajo de venta facilitándote los detalles sobre el producto.
En la era de Internet el usuario revisa foros de coches, visita la web del fabricante, descarga las características y precios de las diferentes opciones, revisa las opiniones de otros usuarios que hayan comprado ese coche y finalmente llega al concesionario. Este usuario no necesita que le vendan nada porque posiblemente está más informado que el propio vendedor y lo que quiere es comprar.
Vivimos en la época del consumidor informado y las estrategias de marketing y ventas no pueden ser las mismas que las que había antes.
Conoce a tus visitantes
Con sistemas de analítica web como Google Analytics sabemos la cantidad de visitas que tiene una web, el número de conversiones de objetivos y contamos con una gran cantidad de estadísticas, pero desconocemos lo que hace cada usuario en particular.
Un software de Inbound Marketing como Markitude identifica al usuario desde el primer momento en el que llega a tu web y comienza a almacenar sus interacciones con cada una de las páginas. De esta forma estamos empezando a saber cuál es el interés de ese usuario único. Pero todavía sigue siendo un visitante anónimo.
Para obtener los datos de la persona que está navegando por nuestra web y convertirlo en un lead conocido, debemos poner en práctica nuestro marketing de contenidos. Si por ejemplo, publicamos un contenido de valor como un E-Book, en el que para descargarlo le solicitamos al usuario que complete sus datos en un formulario (como mínimo deberemos solicitar su e-mail). En cuanto lo complete, el usuario quedará identificado y el software asociará toda la navegación anterior a esos datos de contacto con el añadido de que abriremos otro canal de comunicación con él a través de campañas de e-mailing.
Si queremos saber quién es la persona que está navegando por nuestra web, le tenemos que entregar algún contenido que considere interesante. Si para acceder a este contenido ponemos un formulario en el que nos tenga que facilitar su email, ya podemos tener identificado a este usuario. Además ya podemos empezar a comunicar con él a través del email y guardar sus interacciones también por este medio.
Este es un punto muy importante ya que un sistema como Markitude puede identificar a un usuario aunque utilice varios dispositivos.
Dale a cada uno lo que está buscando
No todos los visitantes buscan lo mismo, ni están en la misma fase de compra. Es muy importante que identifiquemos que quiere un usuario y cuál será su próximo paso para poder completar su experiencia con nosotros y poderle ir guiando hacia el objetivo que tenemos marcado.
Carecer de un software de Inbound Marketing puede suponer en un mercado tan competitivo como el actual perder una gran cantidad de oportunidades de venta porque el control del proceso de compra de los usuarios no está en tus manos.
Cada vez más empresas están implementando estos sistemas para captar más clientes y mejorar sus procesos de marketing. Y para que esta misión tenga éxito, es necesario también contar con profesionales del marketing que sepan planificar y ejecutar estrategias ganadoras.